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Educación Superior: espejos y reflejos

15 junio 2013

1. Espejos. La situación creada por el anteproyecto de ley de educación universitaria, que discute la Comisión del Educación del Congreso ha ocasionado reacciones en contra. La puntería no va contra la sustancia del tema sino porque se propone una Autoridad Nacional de Educación Universitaria que debe fiscalizar el uso de los recursos y la calidad de la educación que se imparte en las instituciones universitarias públicas y privadas.

¿Cuál ha sido la reacción? Comunicados y pronunciamientos en los medios de comunicación escritos de nivel nacional. Todos se centran en la defensa de la autonomía universitaria. Algunos más atrevidos invocan la garantía institucional y los derechos fundamentales y libertad de cátedra.

El espejo que no se quiere ver es que se confunde o se quiere confundir, que bajo el manto de la autonomía universitaria se esconden otros intereses, otros aspectos que no tienen nada que ver con la universidad, su autonomía ni la libertad de cátedra. ¿No es vox populi la denominación que reciben varios centros de estudios superiores universitarios? ¿No se ha denunciado que existe cierta exclusión en los centros de trabajo de los egresados de ciertas universidades? ¿Es la Asamblea Nacional de Rectores la entidad que puede ser juez y parte para valorar y velar por la calidad de educación superior que se oferta? ¿Quién debe velar por la educación superior nacional, el Estado o el conjunto de instituciones que dependen de él?

El contenido de los comunicados es muy retórico y choca con una realidad que desdice lo que cada ente universitario expresa. Los problemas de la educación superior y de la estructura universitaria no se resuelven sólo con la acreditación, medida que fue dada anteriormente y que la ANR, desde hace muchos años trataba de impulsar, pero se quedó en el intento.

La defensa de la autonomía no debe ser de palabra escrita solamente sino práctica. Tampoco autonomía garantiza calidad de la educación y de gestión, si las autoridades no observan lo ordenado en la ley. La historia de nuestra educación superior está empedrada de buenas intenciones y de declaraciones. ¿Cuál ha sido el resultado? Triste historia de la educación superior que fue perdiendo prestancia desde la década de los 70 en adelante. No tenemos un pensamiento académico que nos muestre el talento de nuestros estudiantes y profesionales. ¿Qué sucedió? Quienes revisen la historia de la educación en cada facultad pueden tener la respuesta. No existen personajes que destaquen. Si los hay, es por su propio esfuerzo y porque salieron al extranjero.

El espejo de nuestra educación superior es opaco desde hace mucho tiempo. Los esfuerzos por limpiarlo no pueden dejar de ocultar que el exceso de libertades no contó con la debida responsabilidad para administrarla. Escasez de debate académico, político, hizo que se apoderase la sinrazón perturbadora de Sendero Luminoso, con ideas trasnochadas. Eso cautivó a estudiantes incautos y fue destruyendo lo que debía ser la educación universitaria, reemplazándola por remedos de cátedras y catedráticos, con excepciones. Salir de ese pozo, cuesta e invita a replantear prioridades, estrategias, objetivos. Por ello escudarse en la autonomía, respaldada por la Constitución, no es suficiente. Quienes esgrimen esa razón han dado muestras de su ineficiencia.

2. Reflejos. El dictamen de la Ley Universitaria que viene siendo discutida en la Comisión de Educación del Congreso, debe presentarse al pleno una vez formulada como propuesta.

Los temas principales en los comunicados y pronunciamientos publicados en los medios defendiendo la ley vigente, son la defensa de la autonomía universitaria, el oponerse a la existencia de una Autoridad Autónoma de Universidades, y que no se cree un viceministerio de educación superior. Frasear los sustentos no sólo sería fatigoso sino innecesario pues es la trasnochada defensa de intereses que poco aportan al cambio y al desarrollo del país. En esta “sopa de letras”, un pronunciamiento de docentes y estudiantes universitarios marca la diferencia y aporta a lo sustantivo en el debate. Es necesario un cambio.

En interesante entrevista, el presidente de la Comisión de Educación en Ideele Radio da a conocer el intríngulis que se va armando detrás de una campaña defensiva de un statu quo universitario amparándose en la “autonomía” universitaria. sin reparar que muchas veces en su nombre se han cometido excesos y arbitrariedades. No es lícito recordar la Reforma de Córdoba, a la hora nona, cuando lo que se quiere no es “desmontar” la autonomía como la conciben las autoridades universitarias, sino tratando de escuchar y responder a quienes sufren las consecuencias de su mala aplicación: docentes y alumnos universitarios. Ellos no son invitados al debate, ellos no pueden dejar escuchar su voz. Sin embargo en un Pronunciamiento, la Federación de Docentes de la Universidad Nacional Pedro Ruíz Gallo da cuenta de un Proyecto de Nueva Ley Universitaria de la FENDUP (Federación Nacional de Docentes Universitarios del Perú), aprobado en el IX Congreso Nacional Extraordinario realizado en Huánuco en Noviembre de 2012, donde señalan los puntos más importantes: respeto a la autonomía universitaria; creación del Consejo Nacional de Universidades; voto universal para la elección del rector, vicerrectores y decanos; creación de un vicerrectorado de investigación..

El presidente de la Comisión de Educación ha expresado que existen muchos intereses detrás de esta forma de defensa de la “autonomía” universitaria. Por ello es que se refleja en el debate hacia dónde quieren ir. Si han contado con la autonomía tantos años y no la han sabido administrar en función del desarrollo del país y los intereses de la formación de las nuevas generaciones de profesionales ¿por qué se cayó en la mediocridad, la burocratización y el “enjuague” político?

El parapetarse en defensa de la autonomía universitaria, sin una reflexión en profundidad y una autocrítica sostenida de lo que ha sido en estos decenios del siglo XX y lo que va del XXI, es cuasi burlesco. Muchas buenas intenciones en el nombre de la autonomía han sido dadas y se han parapetado en el grito de Córdoba sin saber que “…el Manifiesto hace una severa crítica de la vida interna de la universidad, y en especial rechaza el anacronismo y autoritarismo con que se conducía la vida académica. En realidad, esta crítica marca el rompimiento de la universidad del siglo XX con la decimonónica. “ (Jaime Ornellas Delgado. México. Reflexiones en torno a la autonomía universitaria. Biblioteca de Clacso). ¿Las actuales autoridades estarían dispuestas a hacer una “severa crítica” de cómo se viene utilizando la autonomía en las universidades?

3. Conmociones. Los temores más allá de la autonomía universitaria es que se cree un ente superior que supervise la calidad de la educación, fiscalice el uso de los recursos de las universidades. Además que autorice la creación de universidades públicas y privadas.

En realidad detrás de la campaña subyace el no querer revisar la historia de la autonomía universitaria. Revisar la historia de la autonomía permitiría analizar la situación real y objetiva y no quedarse en denuncias, paralizaciones y demás reclamos porque obstaculizan cualquier desarrollo institucional y académico. Quienes han postulado esta nueva ley la fundamentan en que nuestras universidades no vienen respondiendo a las demandas contemporáneas. Tampoco han permitido debatir sobre lo que es y debe ser la autonomía en el contexto histórico, permitiendo saber qué es lo esencial de ella para mantenerla y dejar de lado aquello que no permite una dinámica de acuerdo a los nuevos tiempos, al proceso de desarrollo y a las aspiraciones de las jóvenes generaciones.

En este sentido es bueno recoger en el debate lo que la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) en 1966 definió como autonomía: la integración de tres autonomías inseparables: la académica, la administrativa y la legislativa. Y precisa que la autonomía universitaria es esencialmente la libertad de enseñar, investigar y difundir la cultura. (Ornellas Delgado,J. Op.Cit.)

Querer rechazar cualquier cambio en la ley universitaria es darle la espalda a los retos que nos presenta el desarrollo. Es hacerle el juego a quienes no quieren que se luche contra la dependencia; a quienes creen que el pensamiento único es la solución para la educación de nuestros jóvenes. La percepción de la autonomía de las autoridades universitarias es anacrónica. Hoy la lucha contra la autonomía está signada por la no transformación de la educación como simple mercancía, que le hace el juego al neoliberalismo proporcionándole los profesionales que el mercado requiere en los procesos de producción que ellos eligen. ¿Los han pensado los rectores?

Existen sin duda puntos para seguir debatiendo y que no deben quedar sueltos o postergados. Si bien debe darse un renovado contenido a la autonomía universitaria, debería cuidarse la actual crisis que se vive en la educación superior en un gobierno democrático y transparente para no aparecer como una imposición sino la decisión de una potestad que tiene el legislativo para renovar las instituciones que lo ameriten. La universidad es una de ellas. Por ello sea bienvenido lo que implique reestructuración, mejora, actualización. En este sentido contar con una organización autónoma que las gobierne “Superintendencia Nacional Universitaria” (SUNAU) es un salto cualitativo. Otra es la acreditación obligatoria de la casa de estudios. De ello dependerá que se entreguen títulos a nombre de la Nación. Las instituciones de educación superior que no logren ser acreditadas en tres intentos, serán cerradas. El SUNAU asumirá las labores del CONAFU.

Los miembros del SUNAU serán nominados por el ejecutivo a propuesta del Ministerio de Educación. Aquí podría haber una observación, por la injerencia política. Sin embargo esto se deberá abordar en el debate del pleno en el Congreso, y proteger la autonomía de la nueva institución, de la manipulación e imposición político partidaria.

Cuando autoridades de la ANR cuestionan la creatividad de SUNAU, el presidente de la Comisión de Educación del Congreso recuerda que ya el año 2008 el Tribunal Constitucional recomendó al Estado Peruano crear un organismo regulador de la educación universitaria. Dijo además que la ANR y la CONAFU a lo largo del tiempo no han sido capaces de poder enfrentar los problemas con imparcialidad, con visión del país y sugiere la creación de una superintendencia.

Expresó además que el SUNAU afrontará los siguientes desafíos: garantizar el derecho de una buena calidad de educación para los estudiantes; enfrentar el desarrollo, la globalización, las demandas de la ciencia y tecnología, la innovación. (Entrevista al Presidente de la Comisión de Educación del Congreso: Gral Daniel Mora en Ideele Radio, 12.06.12)Todo ello respaldado por el Art. 18º de la Constitución de la República que garantiza la autonomía universitaria.

Esta es una tarea enorme que la sociedad está viendo con buenos ojos, pues se sacará a la universidad de la mediocridad, de los arreglos políticos, del descuido académico. Esperemos que el pleno del Congreso esté al nivel de lo que el país necesita y no defienda intereses mercantiles, pues algunos congresistas son dueños de instituciones de educación superior, y velan por sus intereses, antes que por los del país. Es conveniente que no se enreden en cuestiones formales sino sustantivas que son las que importan: el contexto de transformaciones sociales, políticas y económicas en la región; la función social de las universidades, y los desafíos epistémicos y epistemológicos.(Roberto Leher (Compilador) Por una reforma radical de las universidades latinoamericanas. CLACSO) ¿Habrá tiempo para ello? ¿El debate alcanzará el nivel que merece? (15..06.13)

LEY DE REFORMA MAGISTERIAL

27 noviembre 2012

1. Nombre inadecuado: La presente ley de Reforma Magisterial aprobada entre gallos y media noche, sin un debate sustantivo, sin aportes importantes, sin mirar más allá del “sonsonete” de que nunca nadie cumplió con los maestros como ahora. A veces la soberbia enturbia la razón y obnubila la inteligencia cuando se ignoran antecedentes, acuerdos, recomendaciones a las que se encuentra comprometida la educación nacional.
Si uno quiere ser sincero, esta ley no aporta nada a la sustancia de lo que es el magisterio. Todo se reduce a la parte crematística de la profesión docente. Por ello es una “reforma” de lo legislado a nivel de situación laboral y remuneraciones y las formas como se deben observar su aplicación. ¿Qué implica esta norma?
El Presidente de la comisión de Educación, Juventud y Deporte expresó en el informativo del Congreso “Quienes cuestionan la reforma aprobada les sugiero que primero lean la ley. Es una norma que unifica dos leyes, esa es la gran ventaja y lo que la hace más equitativa más justa. Es eminentemente meritocrática, se implementaran evaluaciones, formaciones continuas a través del Ministerio de Educación con maestrías, doctorados, se empodera al director para una mejor función del ejercicio profesional docente y su participación en las evaluaciones, entre otros tantos beneficios que estará al servicio de todos los maestros del país”, (EL HERALDO, 22.11.12) ¿Cómo la podemos leer si no se publica nada de la versión oficial? ¿Han tenido el tiempo suficiente para incorporar los aportes de los congresistas en el Pleno del Congreso?
Lo complejo de este discurso que busca explicar aquello que no es se complica más cuando sigue declarando “… que otro de los objetivos es garantizar la calidad de la institución educativa, la idoneidad de los profesores y autoridades educativas, así como el buen desempeño para dar al alumno una educación de calidad. La Ley busca beneficiar a más de 200 mil docentes y establece ocho escalas magisteriales a las que podrán acceder los profesores a lo largo de sus 30 años de servicio, ya que el ingreso a la carrera magisterial será por concurso público y se formaliza con resolución de nombramiento en la primera escala magisterial”, agregó.”
Ley del profesorado, Ley de Carrera Pública Magisterial, Ley de Reforma Magisterial, son sinónimo de mejoras al escalafón docente. Por ello debería denominarse con propiedad esta Ley que trata de conciliar formas y maneras de clasificar a los docentes en el régimen laboral de acuerdo a leyes concordadas sobre las relaciones del Estado con sus trabajadores. Lo demás es discurso para las graderías.
2. Cuando el desconocimiento nos gobierna. Muchos han opinado sobre este dictamen, muchos han alcanzado aportes, pero ha primado una decisión política que hizo caso omiso de lo que significa derechos adquiridos, se ha mezclado lo profesional pedagógico y lo laboral remunerativo.
Indudablemente, había que racionalizar la herencia recibida, pero no crear el caos con esta LRM que ha sido el disparador de la situación en la que se encuentra la educación nacional.
¿Cómo puede llamarse LRM cuando de reforma no aporta sino hace un reordenamiento basado en la necesidad de concordar las anteriores leyes? ¿Cómo puede confundirse planos en una legislación que trata de poner orden en el escalafón docente y a la vez también expresa ““Se establece una serie de sanciones que van desde la amonestación hasta la destitución del servicio la cual se producirá por no presentarse a la evaluación sin causa justificada, así como el haber sido condenado por delito doloso, contra la libertad sexual, apología o delito de terrorismo, ebriedad, hostigamiento sexual, entre otras faltas que atenten contra el proceso educativo y perjudique a los alumnos” (Ibídem).
Las intervenciones de algunos congresistas la noche del pleno donde no hubo debate sino un sinnúmero de planteamientos y observaciones al dictamen hicieron referencia a ciertas “trampas” que puede servir de pretexto para no cumplir con lo planteado en la ley. Por ejemplo “las asignaciones” dependerán de los recursos con que cuente el presupuesto. En buen romance depende de lo que diga el MEF. ¿Y lo que dice el Acuerdo Nacional? Otra perla es la que se establece en las Disposiciones Transitorias donde se dejan las puertas abiertas para justificar el no otorgar determinado beneficio. En fin,, sería largo enumerar las observaciones que se hicieron. ¿Quién garantiza que éstas serán incluidas en la ley que debería promulgarse?
2. La resaca de todo lo sufrido. Las reacciones no se han dejado esperar. Sobre todo de quienes tuvieron la oportunidad de mejorar la legislación de la Carrera Pública y por cálculo político no lo hicieron. No se trata de actuar manu militari en democracia y menos en educación y sus maestros. No será fácil aceptar una ley que no refleja el sentir de lo que los docentes esperaban. No se trata de oponerse, ni dar pie a medidas populistas. Todo lo contrario. Las medidas populistas las padecimos como docentes y estamos curados para dejarnos marear por las promesas provenientes de quienes piensan que los docentes siguen siendo siervos de un Estado que les ha dado siempre la espalda y sin embargo les exige aquello que no se les ha dado.
Una pena que esta oportunidad se deje pasar por carencia de un razonamiento político. Los actores de la educación son personas de la sociedad que tienen la responsabilidad de educar a niños y jóvenes del país. Merecen respeto, merecen comprensión, merecen atención a sus demandas. Se les exige y mucho y saben comprarse el pleito en cuanta cruzada educativa se promueva. Ejemplo reciente es cómo acompañan el proceso que se promueve bajo el lema “Cambiemos la educación, cambiemos todos”.
La tarea en adelante es ardua y la ministra lo ha expresado cuando ha declarado que “Construir las bases de confianza entre el magisterio y la sociedad es ahora el reto”. Sin duda debe hilarse fino políticamente y utilizar los medios masivos de comunicación –por ejemplo el Canal 7; el Canal del Congreso- para hacer una difusión pedagógica y no sólo política de la norma aprobada. Lanzar opiniones a cuanto micrófono y cámara invita no es saludable. No se trata de prefabricar frases ni tener intenciones salvadoras, que de eso está plagada la política nacional. Se trata de tener un discurso coherente, transparente, dirigido a la razón y al entendimiento del docente y a la sociedad. Vendrán posiblemente días duros, pero no debe caerse en la provocación de quienes tratan de desconocer la institucionalidad sindical, con el pretexto de sus observaciones a la LRM y maltratan a los docentes y piden actuar con decisión, es decir con autoritarismo. (Ver el editorial de El Comercio 24.11.12.en http://elcomercio.pe/actualidad/1500727/noticia-editorial-comenzo-carrera) Se debe ser prudente y equitativo en el tratamiento del tema. (24.11.12)

El país del nunca jamás.

21 noviembre 2012

1. Un dictamen. El 14 de noviembre, se conoció el dictamen que la Comisión de Educación, Juventud y Deportes presentó a la Presidencia del Congreso de la República. El texto sustitutorio de la Ley de Reforma Magisterial consta de 79 artículos, 16 Disposiciones complementarias, transitorias y finales.

Días antes el sindicato, publicó en su página web una carta que llamaba a consulta a un Paro Nacional “Contra la Ley antimagisterial y cumplimiento de derechos adquiridos” (Oficio Circular Nº20-CEN/SUTEP). Expresan su posición frente a las medidas tomadas y en otra carta dirigida al Congreso Nacional expresan su preocupación por la forma apresurada cómo se ha aprobado en la Comisión el Dictamen que se presenta ante el Pleno para ser debatido.

El dictamen contiene muchas páginas, de antecedentes y recordaris de lo que se quiere con esta nueva ley. En esencia estamos de acuerdo, pero en la parte crematística se aprecia que de la anterior propuesta “consensuada” que presentó el Ejecutivo, no queda nada.

Se trata de la educación nacional, se trata de los docentes responsables de hacerla suya y ejecutar la política educativa y eso significa palabras mayores. Y por ello ¿cómo un sector social puede aspirar a tanto si los recursos no alcanzan? ¿Cómo atreverse a construir equipos profesionales que empiezan a responder a los cambios, si existe poco interés por solucionar los problemas más sensibles como es el económico, para hacer posible una nueva reforma magisterial?

En el análisis que hace el Sindicato en su carta al Congreso, expresa que se desconocen derechos adquiridos y se le resta al magisterio peruano la posibilidad de hacer una carrera pública.

Así están las cosas. El dictamen tantas veces prometido que se discutiría en el Pleno la semana que pasó y que se aprobaría, quedó en promesas. Sólo se hizo saber a los maestros que se les otorgaría por única vez la suma de 300 soles, tal como se comprometió el gobierno en el momento de la suspensión de la última huelga general.

2. ¿La misma vara? Las recomendaciones que se hacen en el sector productivo cuando una empresa no rinde de acuerdo a lo planificado, es que estudie las causas. La más de las veces estas radican en la insatisfacción de su personal de planta por la poca preocupación para pagarles lo justo en su salario y menos reconocer otros derechos laborales. La empresa debe tomar, entonces, medidas básicas que hagan que los trabajadores se comprometan con los objetivos de desarrollo de la empresa y dar lo mejor de su conocimiento y experiencia para salir adelante. Y podemos ver que eso viene ocurriendo y estamos en un crecimiento sostenido porque existe inversión.

¿Por qué esta misma medida, que es recibida por el sector economía con mucha satisfacción, no es válida para los trabajadores del sector educación? ¿Por qué el Estado no puede tomar la decisión política de tener otra mirada al tema económico de los docentes? Si se quiere de una buena vez que se unifique, dignifique y respete los derechos de todos los maestros con esta nueva ley ¿por qué no actúan en consecuencia? ¿Acaso son los docentes los únicos responsables de su actual situación económica? ¿De quién es responsabilidad la pauperización del magisterio? ¿Sólo de ellos?

Una propuesta coherente que busque realmente una adecuación de lo económico a la propuesta pedagógica y a las nuevas relaciones sociales que se plantean, tiene un costo y éste no se quiere reconocer. ¿Se aspira así a lograr mejores rendimientos de docentes que no pueden romper el círculo perverso de la pobreza que les obliga a tener dos o tres actividades, además de la docente, para poder sobrevivir con su familia de manera digna? ¿Puede exigirse al maestro calidad profesional cuando no cuenta con el tiempo pertinente para una dedicación exclusiva?

Consideramos que seguir con el modelo económico que prioriza en el discurso el desarrollo económico y social y en la práctica un empresario tiene más escucha que un director de una institución educativa o de un docente de aula. Se achaca toda la intransigencia al Sindicato siendo esta, una institución creada para la defensa de los derechos de los docentes. Estamos apreciando hoy en Europa cómo se refieren a los sindicatos quienes están en el poder y quienes representan a los grupos de poder económico y cómo los que pesan en la política son los que representan a las grandes corporaciones como el FMI, el BM y otros.

3. Lo pendiente. Sin duda queda el debate pendiente. Pero si no existe el ánimo de concertar entre lo que exigen los docentes y lo que ofrece el gobierno, no habrá conciliación y menos compromiso. Podrá imponerse una decisión, pero no para solucionar el tema económico de los docentes, sino se refrendará lo que el modelo económico impone a una realidad, sin el menor rubor, quitándole el contenido a lo que significa la equidad cuando se trata de los docentes del país.

De un lado esperamos que exista cordura para rectificar lo que ha sido un mutis para el foro cuando se dice que se han tomado en cuenta todo lo que enumera la propuesta. Sin embargo quedará en el sentir nacional de los docentes, que sus demandas no fueron tomadas en cuenta como base para una solución integral (la propuesta que alcanzó el sindicato para que no se sienta que la nueva propuesta es una degradación, el concepto de evaluación de los maestros introducido por la comisión del Congreso, la poca atención a los maestros contratados, a los auxiliares de educación, los docentes de la educación privada y los cesantes).

Ha habido mucha información sobre experiencias y legislación comparada de Argentina, Chile, Colombia, España, México, Finlandia, Singapur; opiniones de personajes invitados, presentación de la Ministra de Educación; opinión del Consejo Nacional de Educación, de los representantes de los docentes. Sin duda nadie puede oponerse lo que se sustenta en la siguiente cita: “A tales efectos, es muy importante corregir todas las distorsiones en los conceptos remunerativos , simplificarlos y ordenarlos para el pago correcto y oportuno a todos los profesores en actividad, nombrados y contratados que laboran en las instituciones de educación básica y técnico-productiva y los profesores de las distintas instancias de la gestión educativa descentralizada, instituciones y programas educativos, unidad de gestión educativa local, direcciones regionales de educación y el Ministerio de Educación. Cabe precisar que la aplicación de la presente norma, en ningún caso implica la rebaja de categoría ni disminución de las remuneraciones, porque la iniciativa remitida por el Poder Ejecutivo garantiza el financiamiento para su implementación. En consecuencia, la integración de todos los profesores en un solo régimen laboral, con incrementos salariales para todos y mayores oportunidades de movilidad horizontal y vertical durante su vida laboral activa, oportunidades a las que podrán acceder previa evaluación contribuirán a mejorar el desempeño docente, la calidad del servicio educativo público y los aprendizajes de los estudiantes, que finalmente constituyen la misión de la profesión docente y del sistema educativo.” (Dictamen la Comisión de Educación, Juventud y Deportes)

En la letra todo parece coherente, pero la intención es no reconocer derechos adquiridos sino ajustarlos a lo que el ministerio de economía determina. Un verso del vals El Plebeyo (Señor, por qué los seres no son de igual valor) quiere reflejar lo que significa para el docente, una vez más, ser relegado por intereses mezquinos que acrecienta la brecha entre los que tiene el poder económico y los que demandan equidad. Lo que no puede quitarse al docente es el afán de servir mejor, de dedicarse a sus alumnos, a la comunidad. Si ello no merece un reconocimiento quedan como postizas las campañas que se vienen haciendo para alcanzar una mejor educación en el país. ¿Estamos en el país del nunca jamás? (17.11.12)

A LOS MAESTROS CLARO Y DIRECTO

28 agosto 2012

1. Prohibido hablar a media voz. Se realizó la interpelación a la Ministra de Educación y como que no hubiese trascendido el mensaje contenido en sus respuestas. Los medios tan solícitos previo el evento y tan prestos a la denuncia, guardaron silencio. No se han atrevido a seguir el corro de la llamada oposición pues no hay carne para el escándalo y sí muchas verdades. Pero ya sabemos. La verdad nos hará libres y en el mercado esta sentencia está mediatizada de acuerdo a los intereses.

Por ello el silencio post interpelación se ha reducido a al tema de si existen los votos o no para la censura a la ministra. Ni una línea sobre el contenido de las respuestas.

En medio de este silencio se empieza a hablar a media voz, balbuceando algunas opiniones para no desentonar con una oposición que está perdida en la ignorancia y que cree que todo tiempo pasado fue mejor, que no sabe empinarse para ver más allá del muro. En este cuasi silencio recuerdo aquellas páginas de González Prada que leíamos en secundaria a sugerencia del profesor. “Cortesanos, políticos i diplomáticos no piensan así: llaman prudencia al miedo, a la confabulación de callarse, a la mentira sin palabras. Cierto, el camino de la sinceridad no está circundado de rosas: cada verdad salida de nuestros labios concita un odio implacable, cada paso en línea recta significa un amigo menos. La verdad aísla; no importa: nada más solitario que las cumbres, ni más luminoso que los rayos del sol. Rompamos el pacto infame i tácito de hablar a media voz. Dejemos la encrucijada por el camino real, i l’ambigüedad por la palabra precisa. Al atacar el error i acometer contra sus secuaces, no propinemos cintarazos con espada metida en la funda: arrojemos estocadas a fondo, con hoja libre, limpia, centelleando al Sol.” (Discurso en el Teatro Olimpo / Manuel González Prada).

Podría aplicarse este discurso a nuestro tiempo. Estamos en trance de negar todo con tal de que desaparezca el intento de renovación, de cambio, de enfoque. Pero, lastimosamente existe cierta mediocridad cultural que se opone a revisar todo lo construido y a ponerlo en una perspectiva que se ajuste a los cambios que nuestra educación y los maestros requieren y que el mundo está viviendo. La educación de hoy no es sólo preparar para la competitividad, para el desempeño en el proceso de desarrollo. También lo es para el desarrollo humano, para la valorización de las capacidades y competencias de los niños y jóvenes que se educan tanto en la escuela pública como en la privada.

2. Palabra suelta no tiene vuelta. Nos dice el refrán., Pero hoy las palabras tienen un contenido diferente, pues se trata de afirmar el cambio cualitativo en medio del reino del mercado y sus abalorios que no hace sino ahondar las brechas que aún nuestra sociedad sigue arropando y los intereses del capital se entronizan ahora con un discurso que se refugia en el concepto y enfoque de la gestión, sin importarle y tener en cuenta qué significa gestionar en un país diverso, intercultural. Vivimos en medio de contradicciones permanentes que si no las develamos caemos en la confusión, terreno fértil para que se cobije la corrupción en medio de reglas aparentemente modernas pero sin trasunto de una ética que debe presidir las relaciones entre las personas, las instituciones.

En las respuestas de la interpelación se dijeron verdades que han tenido poca acogida porque se percibe a la educación como subsidiaria, que debe estar sujeta a ciertas reglas que el modelo neoliberal impone. Veamos muy rápido algunas:
– venimos a exponer y a explicar ante la Representación Nacional el conjunto de acciones que estamos emprendiendo en el Ministerio de Educación a favor del derecho que le asiste a millones de niños y adolescentes en todo el país, muy especialmente a los más pobres para recibir una educación de calidad.

– las acciones.. son un esfuerzo de poner en práctica el Proyecto Educativo Nacional, aprobado en febrero de 2007 por el Ministerio de Educación y la Presidencia de la República como política de Estado.

– nos moviliza y sostiene el ferviente deseo de avanzar en la mejora significativa de los aprendizajes de nuestros estudiantes, para que desde el inicio de su vida puedan tener oportunidades; y transitar por la escolaridad y seguir estudiando represente para ellos una posibilidad efectiva para ser mejores personas y ciudadanos.

– como país no nos basta que los niños y niñas aprendan solamente a leer o realizar operaciones matemáticas, queremos que aprendan también a ser ciudadanos y a razonar de manera crítica su propia realidad, haciendo uso de los instrumentos que ofrecen las ciencias.

– no hay voluntad de incumplir la carrera pública magisterial, lo que hemos hecho es una evaluación de los marcos legales existentes y de la estrategia de incorporación de maestros, a fin de extender la meritocracia al conjunto del magisterio nacional.

– (Sobre la Carrera Pública Magisterial) Se trata pues de efectuar en adelante convocatorias desde un único marco legal a una carrera igualmente meritocrática, pero que sea para todos los docentes, pues el gran objetivo es llegar con una mejor educación para todos los niños y niñas del país.

Pregunta 12. Explique a la Representación Nacional el contenido que tendría la denominada “Ley de Desarrollo Docente”. ¿En qué se diferenciaría la “Ley de Desarrollo Docente” de la vigente Ley de la Carrera Pública Magisterial?
Ministra Patricia Salas O’Brien: Tal como explicamos en la respuesta a la pregunta número diez, las principales diferencias entre las dos leyes pueden también resumirse de la siguiente manera: Todos los profesores, sin excepción, se incorporan a un sólo régimen laboral.
Segundo, se establece y mejora la remuneración integra mensual de todos los niveles de desarrollo magisterial. Es lo que podría considerarse el piso remunerativo de los docentes.
Tercero, se incrementan las remuneraciones para todos, luego de siete años de estar congeladas para los docentes de la Ley del Profesorado.
Cuarto, se establecen tres jornadas de trabajo, 24, 30 y 40 horas, restableciendo la jornada de 30 horas para los docentes de educación inicial.
Quinto, el horizonte de desarrollo profesional se extiende a ocho niveles de desarrollo magisterial y por tanto ofrece mayores oportunidades de ascenso durante la vida laboral activa del profesorado.
Sexto, se inicia el ordenamiento y la simplificación de los conceptos de pago en dos grandes rubros: la remuneración integra mensual y las asignaciones fijas u ocasionales que tienen conceptos claramente definidos.
Sétimo, se revaloran las principales actividades de la docencia haciéndolas explícitas en su remuneración integra mensual, como son la planificación, la preparación de clases, el desarrollo de las clases, la evaluación de los aprendizajes, las actividades extracurriculares y la coordinación con los padres y la comunidad.
Octavo, se establecen nuevas áreas de desempeño laboral, además de lo pedagógico e institucional se reconoce el trabajo de formación entre pares y la innovación pedagógica.
Noveno, se agregan nuevos cargos de alta responsabilidad, como el director o directora de UGEL, el director o directora de gestión pedagógica, a los que acceden únicamente profesores de Carrera Pública Magisterial y previo concurso público.
Décimo, se accede a cargos por concurso público y se permanece en ellos hasta tres años, período en el cual puede ser ampliado previa evaluación; y solo en el caso del director de UGEL, esta evaluación deberá ser anual y excepcionalmente en períodos menores por tratarse de un cargo de confianza.

Siguen las preguntas y respuestas. A las respuestas tal vez le faltó fuerza, énfasis pero eran contundentes. La Ministra fue transparente, como puede apreciarse en manojo de respuestas que hemos consignado. Al quedarse sin argumentos los interpelantes, recurrieron a analizar el Anteproyecto de Ley, que no era el tema a tratar. Esta falta de argumentos puso en evidencia que había otras razones que motivaron esta interpelación nada técnica, puramente política por haberse atrevido a realizar ajustes y proponer enfoques diferentes a los que se venían desarrollando sin ningún cambio en los aprendizajes.

3. Lo que viene. Sin duda vienen días agitados. Una nueva presentación de la Ministra ahora ante la Comisión de Educación del Congreso, para fundamentar el proyecto de Ley y preparar el documento para el debate y aprobación en el pleno.

Pero las turbulencias no pasarán. El sindicato también ha alcanzado su anteproyecto de Ley, que deberá apreciar la Comisión de Educación del Congreso y tratar de compatibilizarlo. Sin duda habrá aportes importantes, alcances a tener en cuenta. Todo ello en un clima perturbado por el anuncio de una huelga indefinida del SUTEP a partir del 5 de setiembre.

La plataforma de lucha del SUTEP contiene lo de siempre con matices para las graderías y la convocatoria. Esperemos que se llegue a un entendimiento del escenario en que se encuentra la educación nacional. No se trata sólo el problema de una deuda social que hoy se levanta como bandera de lucha sin pensar que la complejidad del monto que se requiere implica más que la totalidad del presupuesto del sector.

Razones existen en ambas partes. Sin embargo sería conveniente que se valore el esfuerzo que se viene haciendo para finalmente encontrar puntos de encuentro y una estrategia para alcanzar equitativamente de un lado la satisfacción de los requerimientos salariales y condiciones laborales y de otro el impulso de un cambio en el sistema educativo para no seguir menguando la calidad de la educación.

La Directora General de Desarrollo Docente, María Amelia Palacios Vallejos, y el Director de Trayectoria y Bienestar Docente, Manuel Paiba vienen llegando a los maestros y maestras del país mediante conferencias virtuales, organizadas por la Oficina de General de Comunicación Social y Participación Ciudadana del Ministerio de Educación. De esta forma clara y directa sin mediación, se responden a preguntas y preocupaciones de los docentes del país.

Sin duda existe mucha desconfianza, muchas frustraciones acumuladas, pero estamos en otro tiempo, vivimos en democracia y no atados a un pensamiento único ni arcaico para proponer como antaño un debate que perturbe y mediatice el diálogo constructivo. Las convergencias se encontrarán si se trabaja con espíritu amplio y pensando que los docentes somos profesionales diferentes, que tenemos derechos y deberes que asumir. ¿Es mucho pedir en nombre de los niños y jóvenes que se están educando en el país? (25.08.12)